viernes, 25 de noviembre de 2011

Yulka



Hoy mi entrada se la dedico a ella a quien me hace seguir cuando todo lo veo mal, a quien me hace seguir luchando para que un día podamos estar juntas.

Yulka.







 El nombre de beluga proviene de la palabra rusa byelukha, que significa blanco.
A las belugas les encanta que sus cuidadores  toquen su lengua.


Las Belugas son mamíferos marinos pertenecientes al grupo de los odontocetos, cetáceos dotados de dientes.
Es característico el color blanco de su piel, lo que les permite camuflarse tan bien que resulta difícil distinguirlas entre los bloques de hielo.

Nacen grises y adquieren el color blanco definitivo entre los cinco y los doce años, aunque en algunos casos perdura  la coloración gris en el borde de sus aletas.
La aleta dorsal ha desaparecido y, en su lugar, sólo queda una pequeña giba o cresta, que no les molesta al nadar bajo el hielo; con ella golpean las banquisas de hielo para abrir huecos por donde asomar el espiráculo y respirar.

Gracias a la gruesa capa de grasa,soportan las bajas temperaturas de las aguas árticas y subárticas. En verano, cientos de ejemplares se reúnen en estuarios y aguas poco profundas, y en invierno, se dirigen a latitudes más meridionales donde aún existen zonas sin hielo.

Como no necesitan  aguas muy profundas, en frecuente ver sus crestas blancas cerca de la superficie. Las Belugas se suelen alimentar de peces, moluscos, cefalópodos y crustáceos.

Su peso llega a 1.500kg en estado adulto y su longitud alcanza entre los 3 y 5 metros.

La cabeza  de las belugas es realmente pequeña en relación  con su cuerpo.  La disposición  de vértebras cervicales no fusionadas les aporta una gran movilidad de cuello. Su musculatura facial les permite gesticular expresivamente.

La ecolocalización cosiste en la emisión de ultrasonidos dirigido hacia el objeto o animal determinado, función que consiguen mediante la deformación de su melón. Al chocar con dicho objeto, los sonidos se reflejan en forma de eco y son recogidos por su mandíbula inferior. El sonido se transmite hasta el oído interno, donde, por último, se envía  la información al cerebro, que construye una imagen casi perfecta de la silueta del objeto y de la distancia a la que se encuentra.
Este sistema  es resulta muy útil para desplazarse sin problemas cuando las aguas están turbias o cuando la iluminación es débil o nula, así  como para buscar su alimento.

Si hay algo por lo que destaquen estos mamíferos marinos, además de por su hermosura es por su amplio repertorio de vocalizaciones que emiten. De ahí que sean conocidos también como "cararios de mar"

Las belugas han sido capturadas durante siglos por muchos pueblos nativos como alimento. Con el rápido desarrollo de la industria  pesquera y las nuevas tecnologías diseñadas para tal fin, su captura ya
no es sostenible y, en consecuencia, has disminuido
dramáticamente muchas de sus poblaciones.

Otra amenaza que se cierne sobre estos mamíferos marinos son los residuos vertidos al mar. Debido al metabolismo de estos animales, tienden a acumular gran cantidad de compuestos contaminantes en sus tejidos adiposos, de manera que se convierten en auténticos almacenes tóxicos. En áreas altamente contaminadas, cuando un ejemplar de esta especie aparece varado en las playas, ha de ser tratado como
residuo peligroso por su elevado contenido a contaminantes.

Yulka fue mama en día 2 de Noviembre del 2006, la cría, un macho que midió al nacer  1,60 metros  y peso cerca de 65 kilos, presentó desde el momento de su nacimiento una "natación errática" y un "exceso de flotabilidad" que preocupó a los veterinarios y encargados de la joven beluga.

La inexperiencia de Yulka provocó que no colaborara en la alimentación de la cría así que, desde el tercer día de vida, sus cuidadores comenzaron a extraer leche de la madre mediante ordeño y a administrársela directamente a la cría.

Sin embargo, la madre dejó de producir leche y los responsables han tenido que sustituirla por una fórmula artificial de leche complementada con suero sanguíneo de Yulka para proporcionarle los niveles de defensa adecuados que permitan desarrollar su sistema inmune.

Finalmente, 25 días después de su nacimiento, un 27 de Noviembre del 2006 el bebe de Yulka falleció.



Aquí un vídeo de Yulka.
Gracias por existir y por darme fuerzas cuando no las tengo... algún día estaremos juntas.